Contenido
Urbanismo
Sendero y Mirador Ecológico La Delicia / Estudio 685 / JETLAG ARQUITECTOS S.A. / Jorge Jarrín Coello, arq. msc.+ Francisco Cevallos B., arq.
Complejo Termal de Baños de Agua Santa / Boris Albornoz y José Luis Flores, arqs.
Arquitectura
Edificio Halcón / TEC - Taller EC
Museo Arqueológico y Centro Cultural de Orellana, MACCO / Rubén Moreira Velásquez, Pablo Antonio Moreira Viteri, María Natalia Corral Fierro, Yadhira Susana Álvarez Castellanos, Milton Vladimir Chávez Aguirre, arqs.
Edificio de Arte Colegio Monte Tabor-Nazareth / Patricio Cabal, arq.
Casa Contenedor / Sebastián Calero y Daniel Moreno Flores,arqs.
Casa El Carrizal / Sebastián Calero y Daniel Moreno Flores, arq.
Casa el Guarango / Bernardo Bustamante Patiño, MDA, arq.
Casa de los mil y un cuentos / José Fernando Gómez M., arq.
Casa Cubo / Gonzalo Diez y Felipe Muller, arqs.
Quincho 2V / Gonzalo Diez y Felipe Muller, Álvaro Borero S., arqs.
Casa MA / María Isabel Fuentes Harismendy, arq.
Hotel Colonial / Rubén Moreira Velásquez, Pablo Antonio Moreira Viteri, María Natalia Corral Fierro, Yadhira Susana Álvarez Castellanos, Milton Vladimir Chávez Aguirre, arqs.
Caja de Cristal, para mirar a las estrellas / Rolando Moya Tasquer, arq.
Plaza Artesanal Reina Victoria / TEC - Taller EC
Historia
Rubén Moreira, valiosa huella en la historia y arquitectura ecuatoriana / Evelia Peralta, arq.
Diseño
Oficinas Politik / Carolina Cordovez y Carolina Vaca, arqs.
BO EM / Denisse Cabrera
Actualidad
Interiores sustentables / Verónica Figueroa, arq. / Ecuador Green Building Council
Sensación y percepción: Espacio-Tiempo
““…el arquitecto no crea primero el espacio interno y luego el exterior o por separado: creo todo el organismo al mismo
tiempo.… Si bien es cierto que la visión del espacio interno excluye la del espacio externo, es también cierto que existe
la “cuarta dimensión” , el tiempo de los sucesivos puntos de vista, y que el camino del hombre no se desarrolla solo al
interior o solo al exterior, sino en uno y otro consecutivamente”. ….
De Bruno Zevi en “Saber ver la arquitectura”
El tiempo y el espacio, desde Einstein a esta parte se entienden como variables inseparables. Es decir que al pensar la arquitectura necesitamos transitar las cuatro dimensiones. Nuestras percepciones no nos muestran la realidad de las cosas tal como son, sino una visión relativa a nuestra posición y sensación. Desde un entendimiento amplio diríamos desde nuestra subjetividad, es decir, desde la realidad decodificada a partir de un mundo interno personal. La percepción es la interpretación de nuestras sensaciones, otorgándoles un significado, al integrar a todos los estímulos. Esto, a su vez, nos es limitante, puede provocar universos infinitos de entendimiento, pero también dificultades, por ejemplo, cuando miramos lo que está adelante no podemos ver lo que está detrás. Los límites nos mantienen, nos retienen y también nos confrontan y nos explican lo que somos, desde nuestra subjetividad e individualidad.
El tiempo y el espacio son maleables, dependen de la velocidad y de nuestra ubicación, entonces dos medidas diferentes de la misma cosa, pueden ser a la misma vez correctas, aunque a priori nos parezca imposible, es así como lo relativo se impone. La arquitectura esta hecha por y para seres humanos, con toda su subjetividad a cuestas, la del arquitecto y la del usuario, lo que implica pensar en la sensación del espacio construido, transitado y vivido a través del volumen vacío como producto de las características y posición de sus límites. Aunque la sensación es predecesora de la percepción, es esta última el objetivo de nuestros trabajos, porque en ella radica el procesamiento de lo que los sentidos producen, convirtiendo en entendimiento a tales percepciones.
El espacio construido puede estimular los sentidos, de hecho siempre lo hace, lo importante es cómo esto nos afecta a largo plazo, cuando se convierte en una experiencia a través de la manifestación de nuestra percepción.
Cuando hablamos de subjetividad lo hacemos desde su comprensión en tanto responsabilidad individual, en donde la comprensión y aprehensión de las cosas, hacen uso de la capacidad individual para entender la complejidad en su mente y cómo el espacio (hablando de arquitectura) enriquece o empobrece la vida. Esto, tanto para arquitectos como para usuarios, porque la subjetividad no es algo cerrado, sino que los valores, ideales, costumbres, ética y estética de un sujeto se construyen no sólo desde mecanismos internos, sino también a partir de la cultura en la que estamos inmersos. A la arquitectura, la identificamos y apropiamos, desde lo perceptivo, de lo que pertenece a uno y a otros, en lo particular y lo general. En un proceso dialéctico, el ser humano hace suyo aquello que pertenece a la subjetividad de otros, es decir a lo común colectivo, lo que implica que somos capaces de ponernos en el lugar del otro, por lo tanto podemos diseñar para el otro, en la magnificencia que esto implica.
Rómulo Moya Peralta, arq.
Quincho 2V
Caja de Cristal
Oficinas Politik
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Es un apéndice a una casa diseñada ya casi 7 años. La ampliación consta de un espacio social exterior cubierto para una parrilla, una sala informal y un comedor. Al existir ya la casa principal, los clientes buscaban un lugar de uso informal y con contacto directo al jardín y el exterior, que sirva como espacio de ocio y reunión dirigido al disfrute de la comida, la relajación y la conexión con la naturaleza.
El trabajo del arquitecto es encerrar, delimitar, un segmento del espacio, transformándolo en arquitectura. La
arquitectura es esencialmente espacio
interior, pero no vive por sí misma, sino
que está aliada a la arquitectura que
la rodea, al paisaje y a la naturaleza. La percepción del segmento de espacio delimitado tiene su correspondiente contrastado en el espacio interior, saliente al exterior, entrante al interior, convexo, cóncavo. La relación del espacio exterior e interior es constante y cambiante.
Este proyecto se desarrolla a partir del
requerimiento de Politik de reinventar
su espacio físico de trabajo parar crear
uno que aporte a mejorar la calidad
de vida de las personas que interactúan dentro de las oficinas –desde clientes, asociados o analistas, secretaria o mensajero–. En el que sientan que es el mejor lugar en el que podrían trabajar entre compañeros y jefes. En el que demuestren cercanía y puedan compartir sus conocimientos y
aprendizajes.